lunes, 11 de abril de 2016

VOLVER A LAS ANDADAS


Cuando falta menos de un mes para que se cumplan diez años de las inmotivadas, desproporcionadas y vergonzosas intervenciones de Afinsa y de Fórum Filatélico, después de más de treinta sesiones del juicio oral de Afinsa (Penal), vemos con intranquilidad que el Tribunal está suspendiendo sesiones (31 de marzo, 12 y 13 de abril de momento) y lo más inquietante, declaraciones de testigos que podrían aportar, aún más si cabe, claridad al procedimiento.

Las sesiones del juicio oral de Afinsa que tienen lugar en la sala de lo penal de la Audiencia Nacional en San Fernando de Henares, están poniendo de manifiesto que, lo que parecía, antes de iniciarse, un “paseo” para la fiscalía y para los que de forma interesada y torticera fueron los artífices de la intervención, se ha convertido, en un quebradero de cabeza para el Tribunal.

El resultado de lo hasta ahora visto en las sesiones puede resumirse en las siguientes frases: “Afinsa no debió ser intervenida” y “La actividad de Afinsa era legal”.

Lo que el Tribunal deberá juzgar, no serán diatribas, elucubraciones, vaguedades, opiniones, falta de rigor en las explicaciones, etc. Tendrá que tener en cuenta las irregularidades e ilegalidades que las instituciones del Estado han realizado, en base a los hechos y evidencias que se han puesto de manifiesto en el propio juicio. No valen los indicios endebles y el Tribunal lo sabe, como también sabe que ahora estamos ante penas de cárcel y eso son palabras mayores.

No se debe condenar a ninguno de los antiguos administradores de Afinsa si no se tiene nada contra ellos. Y, hasta ahora, no se tiene.

Por más que se empeñen, el Estado tendrá, en algún momento, que responder de los daños producidos a 190.022 víctimas por la inmotivada intervención de Afinsa.

Ahora que tanto se habla de regeneración, política, económica, judicial e informativa, sería deseable que en el ámbito judicial se pusieran, de una vez por todas, las bases para llegar a tener en España una justicia independiente, imparcial, objetiva, digna y por tanto justa.

En esta tesitura, queremos que el Tribunal aplique la LEY (con mayúsculas), ¿O se sumará a las sentencias que sonrojarían al más avezado jurista o magistrado?

VOLVERAN A LAS ANDADAS, como por ejemplo,  el Juez Pedraz en su lamentable instrucción y el juez Vaquer en permanente contradicción, dicho sea con el debido respeto o juzgaran debidamente, con rigor y con justicia, a pesar de …………

La regeneración Judicial sería un hecho y los investigados y las 190.022 víctimas tendríamos por fin JUSTICIA.